La Procesión de las Bicicletas
"¡Viva la virgen de la bicicleta!"
Una voz potente que sonaba desde un balcón rompía el silencio de la procesión. Lo hizo a ritmo de Saeta, pero no de una saeta cualquiera…
Este viernes 19 la calle de la Palma reunió a aproximadamente 50 personas (y alguna que otra bici) para celebrar una procesión en la que los costaleros no desplazaban vírgenes sino un par de bicicletas.
Tambores que marcaban el ritmo, muecas de emoción, voces de niños que interrumpían el silencio, alguna que otra intervención en forma de discurso o de poesía, mucha ironía concentrada y el intento (a menudo fallido) de mantener el paso al mismo compás.
Se oían muchas risas, sí, pero el motivo de la procesión se lo tomaban bastante en serio: quienes acudían a este curioso evento lo hacían para protestar por lo poco preparada que está Madrid, dicen, para moverse en bicicleta. No se cortan las calles del centro de Madrid un viernes por la tarde porque sí. La procesión convocada por Viern y englobada dentro del proyecto "Biernes con B" perseguía que su ciudad se adapte a este medio de transporte al que cada vez se suman más adeptos.
Eso fue al menos lo que nos explicó unos de los costaleros que durante la procesión aguantó el peso de la Virgen de la Bicicleta sobre sus hombros. “Queremos que Madrid se adapte a las bicis”, insistía.
Aunque estaban convocados a las cinco, la lluvia retrasó una hora la ceremonia. Pero no parece que la espera quitara a nadie las ganas de homenajear religiosamente a las dos bicis protagonistas.
¡Viva la madre que te parió!, gritaba algún espontáneo. ¡VIVA!, respondían los demás.
Os dejamos unas instantáneas del evento: